Una de las más suntuosas residencias de la familia pionera Braun Menéndez hoy alberga el Museo Regional de Magallanes.
Traspasar el umbral de la fastuosa residencia Braun Menéndez, situada en el centro histórico, puede convertirse en un viaje a los inicios de la ciudad. En la actualidad, es el edificio que alberga el Museo Regional Magallanes y que precisamente protege una completa colección de objetos sobre los orígenes de Punta Arenas. Una cuidada muestra que abarca desde los primeros descubrimientos geográficos hasta mediados del siglo XX no sólo testimonia las diferentes etapas del poblamiento urbano, sino también la diversidad cultural de la región magallánica. Es así como el recorrido por las salas enseña a los visitantes las costumbres y características sociales, culturales, económicas y políticas que caracterizaron los primeros asentamientos australes.
Una casona emblemática
El palacio de Mauricio Braun y Josefina Menéndez fue construido en 1903 por el arquitecto francés Antoine Beaulier. Siguiendo el estilo de la época, se compraron y trajeron de Europa desde los materiales hasta el mobiliario y los objetos de decoración. En 1974 la exquisita residencia es declarada Monumento Histórico Nacional y en 1983 los herederos deciden donar todo el predio al estado chileno, el cual reunió las colecciones del Museo de la Patagonia en este nuevo edificio patrimonial. Su colección se clasifica en tres grandes áreas conceptuales: época, histórica y zócalo. El primer sector se ubica en uno de los salones principales y exhibe los muebles comprados por los Braun Menéndez en Francia, Inglaterra y España. El estilo ecléctico, formado por líneas que van desde el neoclásico hasta el
art nouveau con detalles de neorrococó y elementos decorativos de Oriente y África, reafirma el excéntrico lujo de las familias que hicieron fortuna en estas latitudes. El área histórica comprende una muestra sobre la historia urbana y de la región, contada a través de sus objetos, mapas, diagramas, gráficos, documentos y fotografías. El paseo por el museo finaliza en las dependencias de servicio de la casona, que permiten imaginar la vida cotidiana y el funcionamiento del hogar en su época original. Esta importante institución realiza, además de las exposiciones permanentes, muestras de arte itinerante y expresiones culturales abiertas a la comunidad y a los turistas.