Ubicada en el delta del río Palena, esta pequeña población tiene un encanto especial.
Raúl Marín Balmaceda ofrece amplias costas de mar con inmensas playas de arena hacia el océano Pacífico. Sus fiordos y el contacto con la naturaleza hacen de ella el lugar ideal para el descanso y la práctica de actividades marítimas, incluida la pesca.
Forma parte de la Cuenca del Palena-Queulat, un territorio aún inexplorado que reúne bosques muy verdes y cuencas de aguas muy puras.
Raúl Marín Balmaceda se comunica por vía marítima mediante el trasbordador que llega de la ciudad de Quellón, en la parte más austral de la isla de Chiloé. De esa manera, pasajeros y vehículos tienen acceso a los centros poblados. Por tierra, está ubicada a 75 kilómetros de La Junta por ruta paralela al río Palena. El servicio de un transbordador permite sortear diariamente dicho río. Su principal actividad económica está constituida por la extracción de productos de mar.
Esta población presenta una innumerable cantidad de atractivos turísticos. Su fiordo Pitipalena y el brazo Pillán; paseos a La Poza, al estero Los Patos y la Cueva de la Virgen son algunas de las salidas habituales en lanchas de paseo.
La pesca en todas sus modalidades tiene un lugar preferencial entre los pobladores y los visitantes. Puede realizarse desde la costa o embarcados para navegar por sus ríos y fiordos y realizar la tan apreciada pesca con mosca.
Sus playas de La Barra, las termas y la posibilidad de hacer avistaje de cetáceos y aves suman a Raúl Marín Balmaceda atrayentes motivos para conocerlo.