Tanto en su avenida principal como en un parque temático aledaño, las figuras murales son un reflejo de la historia de Santa Cruz desde los tehuelches hasta la fecha.
El muralismo es un arte que se lleva a cabo en espacios de gran tamaño aprovechando paredes o armando muros sobre los cuales se plasman distintas disciplinas y técnicas decorativas.
Comandante Luis Piedra Buena agrega a su calidad de vida la satisfacción de presentar en sus calles y en un parque temático piezas de talento colectivo. Caminamos con lentitud por la avenida Gregorio Ibañez para encontrar las huellas de los artistas plásticos que dejaron plasmados en los murales su pensamiento y visión del mundo. Nos llamó la atención la intensidad de sus colores y a lo largo de ocho cuadras fuimos interpretando estas creaciones callejeras. Nos acercamos luego hasta el parque temático ubicado en las cercanías del puente sobre el río Santa Cruz. Allí también el despliegue de obras es increíble y de lo más variado; algunas incluso están basadas en obras literarias de escritores locales. Temas como la creación del mundo según la cosmovisión tehuelche, momentos de la vida del comandante Piedra Buena, la llegada de los inmigrantes europeos y la Patagonia Trágica han sido representados en coloridas versiones murales. Todo se inició con un movimiento muralista nacido en
la provincia de Corrientes, que se extendió al país y eligió esta ciudad santacruceña en el año 2005 para realizar el trabajo que hoy se disfruta. Sus inspiradores fueron José Kura y Daniela Almeida, autores de las obras que observamos, a quienes acompañaron los artistas locales María Corea y Patricio Figueroa, y un gran número de seguidores de la actividad.
Uno de esos creadores nos explicó cuáles eran las dos técnicas aplicadas: esgrafiado y piedras policromadas. En la primera se trata de superponer capas de revoque coloreadas que luego se raspan con una espátula de metal para ir haciendo coincidir los colores con el dibujo calcado y lograr el boceto definitivo antes que fragüe el material. Los orígenes de estas aplicaciones son etrusco, fenicio y cretense y ya en el siglo XX fueron
aggiornadas por pintores mexicanos que lograron imponer su movimiento artístico. La recorrida nos permitió entender mejor el sentido de las obras, que son un
bonus track entre las diversas actividades con que cuenta Piedra Buena y que, orgullosa, comparte con sus visitantes.