Se accede a poblaciones originales del sur de Chile, en las cuales las barcazas que surcan los ríos permiten movimientos de costa a costa uniendo entre sí increíbles parajes.
Desde
Cochrane y por la Carretera Austral hacia el sur, accedimos al puerto fluvial El Vagabundo, donde las distintas barcazas unen por agua
Caleta Tortel, Río Bravo y Puerto Yungay. Navegando por el río Baker, llegamos a una hermosa población donde las casas parecen asomarse a la bahía, encimadas unas con otras con sus chimeneas humeantes. Caleta Tortel tiene muy poca población y es muy peculiar, ya que en su interior está conectada por pasarelas de madera de ciprés de las guaitecas que unen todos los edificios por sobre el agua. No existe movimiento vehicular. El área presenta un régimen de lluvia muy abundante, por lo que el río Baker y sus adyacentes suelen llevar mucha agua todo el año y las casas llamadas palafitos se soportan sobre altos troncos de madera para evitar las inundaciones. Ubicada entre dos campos de hielo, es surcada por fiordos, canales y estuarios y se destacan los parques nacionales Laguna San Rafael, el Bernardo O`Higgins y la reserva nacional Katalalixar. Un importante espacio ocupa el Campo de Hielo Norte, declarado Reserva Mundial de la Biosfera por la ONU. Con su paisaje de caprichosas formas, ese campo de hielo continental ofrece cumbres, quebradas y numerosos ventisqueros que desembocan en lechosos ríos y lagos que finalmente vierten sus aguas al río Baker. Al noreste de Caleta Tortel y luego de tres horas de navegación se accede al ventisquero Steffen, con sus relieves montañosos y ríos de hielos eternos que provienen del Campo de Hielo Norte. Al sudeste, luego de navegar unas cinco horas, se llega al ventisquero Jorge Montt, que es montañoso, con gran vegetación y una enorme pared de hielos azulados de una belleza deslumbrante, que también proviene del Campo de Hielo Norte.
Pero aún hay más para descubrir y maravillarse. Siempre tomando como referencia la Caleta Tortel, hacia el noreste se encuentra la reserva nacional Katalalixar, limitada por bosques nativos de ciprés de las guaitecas y mañiú. La primera de ellas es la conífera nativa más austral del mundo, está íntimamente ligada al desarrollo económico de la región y se la considera la madera más valiosa de Chile. Más al sur y por la Carretera Austral encontramos Puerto Yungay. En el trayecto, la soledad permite que algún huemul o cóndor salgan al encuentro de los pocos que realizan el viaje. Infinidad de barcazas y lanchas de pasajeros con distintos destinos muestran una manera de vivir diferente. A todo se accede por agua y en los últimos años esa particularidad ha atraído al turismo, en conjunto con las maravillas naturales de la zona. Hasta allí conocimos en este viaje. La Carretera Austral sigue hasta la localidad de
Villa O'Higgins, un pequeño caserío con pocos habitantes y el mismo encanto de los anteriores. De regreso en Cochrane, comentamos que el circuito es tan extenso como las ganas de seguir explorando cada rincón de ese confín chileno.