Los poblados que se encuentran en el recorrido son sencillos y sus posibilidades turísticas crecen día a día debido a sus características.
El punto de partida de este rodeo al lago General Carrera es
Chile Chico por una ruta de montaña que sigue el relieve terrestre sin dejar de mostrar la inmensidad del espejo lacustre. El punto de llegada es Puerto Ingeniero Ibañez, que en los últimos tiempos ha incrementado su movimiento diario ya que llegan muchos visitantes a disfrutar de sus reservas naturales. Hicimos el trayecto en nuestro auto y partimos de Chile Chico hacia el oeste. Nos salieron al encuentro varios pueblos de pocos habitantes pero con casas típicas y muchas hosterías y
lodges desde donde se ofrecen excursiones de pesca y
trekking.
Puerto Guadal fue el primer punto con el que tuvimos contacto, con un balneario de playas de arena de gran belleza y aguas tibias con gran afluencia de público en época estival.
Seguimos adelante hacia Puerto Bertrand que, según nos pareció, es un lugar ideal para el descanso y la pesca con mosca. Desde allí se puede navegar por el lago Carrera y también el Bertrand y por este se llega hasta el inicio del río Baker. Donde ambos lagos se unen, trepamos hasta un mirador imponente para contemplarlos, casi en silencio. Encontramos un bosque con coihues, lengas y ñires, especies autóctonas y de muchos años de vida, y su perfume nos impregnó hasta la ropa. Más adelante localizamos otro mirador, el de Cordón Contreras, que nos impactó tanto como el anterior. En varios sectores la ruta es consolidada y tiene una apariencia de sal gruesa comprimida; siempre se nos presentó angosta, de montaña y con algunos lugares de cornisa.
Encontramos más adelante una etapa de la Carretera Austral que nos condujo hacia Puerto Murta mientras continuaba el terreno abrupto y la vegetación silvestre. Antes, arribamos a
Puerto Río Tranquilo, en el que averiguamos acerca de los paseos en lancha hacia las Capillas de Mármol, además de recorrer en escasos minutos el modesto poblado. Siempre sobre mano derecha, el lago nos acompañó hasta Puerto Murta. Allí recorrimos la bahía y el valle, y observamos los cordones montañosos. Cuenta con gran actividad náutica y turística por su relación directa con el agua. A partir de ese punto debimos apartarnos de la costa y, siempre sobre la Carretera Austral, seguimos hacia Puerto Ibañez. Nos contaron historias de Puerto Cristal y Puerto Venado, que en el pasado tuvieron una importante actividad minera; hoy están abandonados.
Finalmente accedimos a Puerto Ingeniero Ibañez, una población que tiene gran concurrencia de entusiastas de la vida al aire libre. Se organizan salidas a los saltos del río Ibañez, la península Levican y el cerro Castillo y otros puntos interesantes de los alrededores. Nos faltaba aún cerrar el círculo y regresar a Chile Chico por medio de una barcaza que realiza un viaje por agua siguiendo la línea demarcadora internacional con Argentina. Las dos cabeceras de este itinerario son fronterizas y se unen en el país vecino con Palavicini y
Los Antiguos, respectivamente. Nuestro periplo llegó a su fin con la satisfacción de haber conocido un montón de pueblitos que, en tiempos anteriores, solo se podían conectar por agua. Nos quedó pendiente realizar un circuito similar en tierra argentina con el sector oriental del mismo lago, cuyo nombre es Buenos Aires.