En la provincia de Magallanes, en la Patagonia austral de Chile, Punta Arenas es catalogada como zona franca, libre de impuestos y demás gravámenes, lo que la convierte en un destino de visita obligada para adquirir productos de todo el mundo.
Paseo de compras
La Zona Franca ocupa un predio de 53 ha, ubicado al norte de la ciudad, colindante con la Universidad de Magallanes. Visitada mensualmente por casi 850 mil personas, entre pobladores locales y turistas, la Zona Franca es el paseo ideal para hacer compras y disfrutar de los excelentes servicios que allí se ofrecen. En el centro comercial hay más de 120 tiendas y diversas áreas, con una amplia oferta de entretenimiento, tales como pista de patinaje sobre hielo, salón de juegos, cine, patios de comida y cafeterías para hacer que el tiempo pase de manera más amena y agradable.
Entre los servicios, hay bancos, servipag, correos, civil digital, wifi gratis y otros. En las diferentes estaciones del año se presentan exposiciones y ferias regionales.
Desde el punto de vista aduanero, las mercaderías que permanecen en una zona franca se consideran todavía parte del país de origen. Por ello, es una plataforma de negocios y distribución muy importante en la Patagonia y una aliada a la hora de facilitar un intercambio con el mundo. La Zona Franca busca potenciar el desarrollo de un lugar extremo en el continente, como Punta Arenas, con gran valor geopolítico y económico en el estrecho en que se unen los océanos.
Miles de chilenos y extranjeros la visitan diariamente en una rutina que incluye comprar, almorzar, ir a patinar sobre hielo, disfrutar de alguna película en el cine para después seguir comprando un poco más. La exención de aranceles impositivos, entre ellos el impuesto al valor agregado, logra que los turistas vean este centro de compras como un lugar perfecto. Siempre hay stock, al igual que oportunidades imperdibles que despiertan la curiosidad de muchos de los que se acercan hasta allí.
Para los argentinos que viajan por aire, la franquicia al retornar al país es de 500 dólares para los adultos y la mitad para los menores de 16 años. Por vía terrestre, la franquicia es menor, de 300 dólares para los adultos, y nuevamente la mitad para los menores. Al superar esos límites, se debe pagar el 50% del excedente de la franquicia.
La Zona Franca se suma así a las múltiples y variadas posibilidades turísticas que ofrece esta bella ciudad de tradición portuaria y ovina, para quienes quieran conocerla y se animen a perderse por sus coloridas calles. Además, Punta Arenas es una ciudad estratégica para conocer la Patagonia austral y todos los atractivos naturales del estrecho de Magallanes.