A escasos minutos de El Chaltén se encuentra un singular atractivo que permite a los visitantes acercarse hasta un salto de agua pura. Ideal para aquellos que no quieren caminar tanto.
Partimos en auto desde
El Chaltén hasta el final del pueblo, donde un desvío hacia la derecha anuncia el camino al famoso Lago del Desierto, al que se llega luego de transitar 37 kilómetros aproximadamente. El camino es realmente maravilloso y permite obtener distintas vistas panorámicas del Río de las Vueltas hasta llegar a su nacimiento, donde sus aguas se unen a las del famoso lago.
Basta con recorrer 4 kilómetros para encontrarnos con un lugar que tiene su propia belleza y que merece un alto para conocerlo. Bautizado salto del Chorrillo, aquí el río que baja de las montañas nevadas se encajona hasta caer en una importante depresión dando origen a una singular catarata a la que se puede llegar caminando.
Los carteles indicadores avisan que está permitido estacionar; decenas de autos quedan esperando a sus ocupantes que en cuestión de minutos se convierten en caminantes y comienzan a tomar el sendero que conduce hasta el salto. Margaritas y flores silvestres a ambos lados, este pequeño sendero es ideal para aquellas personas que no están acostumbradas a caminar y quieren hacerlo despacio. La caminata no demanda más de una hora ida y vuelta, pero las imágenes del salto son tantas, así como los diversos lugares desde donde se lo puede ver, que generalmente la excursión se prolonga un rato más.
En nuestro caso, la idea era llegar hasta debajo del salto. Comenzamos a seguir el camino que lentamente se fue introduciendo en la espesura que marcaban distintos árboles y plantas típicas de este lugar. Con muy poco grado de dificultad, fuimos haciendo camino y era notable cómo la humedad del salto, al igual que una sensación de frescura, se apoderaban de nuestro cuerpo. Era una sensación más que agradable, que se potenció cuando pudimos divisar esta hermosa cascada y apreciamos cómo allá arriba el río saltaba al abismo y dejaba ver la inmensidad de su caudal que caía formando una bella laguna.
Ideal para descansar, bañarse en sus aguas o simplemente mirarlo, este salto posee un protagonismo especial y particular. Más allá de que existen otros senderos que poseen mayor valor para el caminante, el salto del Chorrillo no deja de ser un lugar que merece conocerse.