Los viejos edificios del Parque Central, donde antes funcionaban los ferrocarriles, en la actualidad constituyen el centro de la cultura urbana de Neuquén capital. Además del museo Gregorio Álvarez, de la sala Emilio Saracco, el centro de referencia histórico cultural Paraje Confluencia no sólo luce una construcción rescatada de aquel pasado ferroviario, sino que también muestra diferentes expresiones artísticas e históricas de la ciudad. El centro Paraje Confluencia funciona en tres casas construidas en la década del '30 por la empresa Ferrocarril del Sud. Estas casas eran conocidas como Colonia nº6 del personal de tráfico y son las únicas que todavía conservan el estilo inglés de principios del siglo XX. A cargo de la municipalidad local, el museo cuenta con tres salas para exposiciones permanentes y temporarias, biblioteca y sala de lectura. Como parte de su patrimonio, exhibe una interesante colección de objetos con más de 10.000 años de antigüedad que pertenecieron a las poblaciones primitivas de la Patagonia norte. Junto a esos elementos de la vida cotidiana, también se exhiben piezas de tejido y fósiles de animales y vegetales encontrados en la región.