Con el sol bien presente, emprendimos el camino hacia el dique Florentino Ameghino junto a Mario, el guía de Flamento Tour y gran conocedor del lugar. Nos alejamos del mar y la estepa. Tomamos la ruta 3, atravesamos la localidad de Trelew y seguimos viaje hasta el paraje Las Chapas. Desde ese punto, mediante un desvío, llegamos a nuestro destino. Previamente, en un lugar del camino, Mario nos mostró unos árboles petrificados, claros vestigios de la Patagonia prehistórica. Realizamos un mini trekking hasta donde se encontraban varios troncos convertidos en piedra. Ya ubicados en el dique, al bajar de la camioneta pudimos observar que una quebrada rojiza daba paso a una gran cantidad de hermosos sauces verdes. A ambos lados del río Chubut se podían ver varias casas de lugareños. Podíamos escuchar el silencio plenamente. Finalmente, bajamos la pendiente hasta la villa por las escaleras que utilizan los pobladores. Por su parte, Mario continuó con la camioneta por arriba de la represa. Alcanzamos nuestro objetivo y nos quedamos boquiabiertos ante semejante maravilla. El dique Florentino Ameghino tiene 255 metros de largo y fue planeado por el Ing. Antonio Pronsato en 1943. Veinte años después, se inauguró.