Por el año 1893, los misioneros salesianos afincados en Punta Arenas, dirigidos por el sacerdote José Fagnano, decidieron crear un museo que representara la valiosa riqueza cultural y ecológica de la región. Bajo esa idea surge esta institución que recibió el nombre de su primer director, el padre Maggiorino Borgatello. Ubicado en la avenida Bulnes y calle Bories, junto al santuario María Auxiliadora, el edificio de dos pisos abre sus puertas a todos los visitantes que quieran conocer el pasado de esta región austral. Hasta 1984 el museo ocupaba una superficie de 700 metros cuadrados, que fue ampliada a 1.700 para comprender toda la colección patrimonial. La variada muestra se encuentra diseminada en 4 niveles que, a su vez, se dividen en secciones de etnología, arqueología, historia y flora y fauna, entre otras ramas. Los objetos y documentos de la labor salesiana, las artesanías y utensilios indígenas, junto a fósiles y animales petrificados de la zona también forman parte de la exhibición. Como era de imaginarse, una de las salas más visitadas es la dedicada a la Patagonia Austral que exhibe una fidedigna recreación de la Cueva de las Manos.