Es frecuente que un destino turístico cuente con un abanico de chocolaterías. A las empresas pioneras se suman nuevas chocolaterías artesanales e innovadoras y, así, va creciendo la oferta de exquisiteces, mezcladas con cucharadas de tradición y mística. ¿Qué chocolaterías se pueden visitar en San Martín de los Andes?
Pata Negra, una visión moderna
Pata Negra es más reciente, inaugurado en 2016. Elabora chocolates y helados artesanales con un estilo más moderno. Se trata de una pareja, compuesta por una sanmartinense y un español, que inició su propio emprendimiento. De la conjunción San Martín de los Andes y España, nació el nombre Pata Negra, como se llama a los jamones ibéricos más ricos. El formato moderno e innovador es la tableta de chocolate.
Mamusia, la primera chocolatería
A una cuadra de la Plaza San Martín, Mamusia es la primera chocolatería del pueblo que comenzaba a definirse como destino turístico a principios de la década del 80. Funciona en un edificio de patrimonio cultural de una esquina emblemática. La tercera generación de una familia llegada de Polonia guarda las recetas de Mamusia, la abuela que comenzó agasajando a sus invitados con postres que pronto dieron origen a la cocina de chocolate. Cuenta con una heladería muy bien puntuada.
Riche Patagonia, un legado familiar
Aunque la marca es nueva, dentro de su estructura se encuentra el legado de la Abuela Goye. La experiencia llega de la familia que se estableció en la colonia más representativa de Bariloche. Riche Patagonia surge con un compromiso renovado para ofrecer sus chocolates con materias primas de calidad, en un camino decisivo hacia los productos agroecológicos. Se encuentra en la calle San Martín y en la base del Cerro Chapelco.
Mamuschka, desde el grano al chocolate
La chocolatería tiene muchos años en Bariloche, donde se inició con el timbal, el producto que conquistó corazones. En 2018 arribó a San Martín, con la propuesta colorida de las muñequitas rusas y sus delicias artesanales. La estética de Mamuschka trasciende las fronteras con productos elaborados con granos seleccionados en origen y procesados por la misma empresa. A la propuesta se suma la fábrica de helados.
La Vieja Aldea, un mundo de chocolate
En la esquina concurrida de San Martín y Belgrano, se encuentra La Vieja Aldea, una tienda de más de 20 años en la ciudad. Es frecuente escuchar a los fanáticos decir que es el mejor chocolate que han probado. Se trata de una empresa familiar que elabora chocolates, bombones y mermeladas. Su esencia particular es que los productos tienen el encanto regional, no se encuentran en otras ciudades. Muchos clientes destacan la atención amable y cordial de los vendedores.
Del Turista, un clásico
Es una marca pionera, inaugurada en 1969 en Bariloche, con numerosos puntos de venta en la actualidad, uno de ellos en San Martín. Es un chocolate de herencia suizo-italiana, aprendida de maestros chocolateros de tradición, con una identidad barilochense. Sus sabores provienen del cacao de Brasil. Del Turista suele ser una marca más económica que otras, con promociones para hacer regalos. El chocolate en rama es su especialidad.