Madera, pintura, asta, lana hilada a mano son algunos de los materiales que, en manos de expertos, producen trabajos de excelente terminación.
A poco de llegar a
Villa Traful, tuvimos conocimiento del proyecto Ruta de los Artesanos iniciado por un grupo de alumnos de 5° año de un secundario. Ellos trabajaron con la idea de promover las actividades artesanales de la región. Este paseo implica la visita a talleres para tomar contacto con los artesanos y sus realizaciones. Así fue como llegamos a la casa de Erica Painepe, quien nos recibió mientras atendía a sus niños de corta edad. De origen mapuche, su apellido significa “volcán cielo azul”. Con sencillez y orgullo por su emprendimiento, nos dijo que mejoró sus conocimientos de dibujo y pintura en talleres de la localidad. Utiliza maderas duras de radal y ciprés que, mediante caladora, gubias y pintura, transforma en bonitos elementos de uso diario. Ofrecía en venta fuentes, cajas, cucharas. Erica continuó con la tradición familiar y trabaja con un telar mapuche. Su madre y tías le aportaron la técnica cuando ella era niña y ofrece sus tejidos junto a los objetos de madera. Logró, así, aunar su salida laboral con el cuidado de la casa.
Música y licores
Cuando visitamos a Julia Irene y Víctor López en el puesto donde ofrecen sus licores, deseábamos conocer el origen de su proyecto de vida. Ella es cantante con estudios terciarios realizados en la ciudad de La Plata y ese arte se vino con ella a la Patagonia cuando decidieron instalarse en el Sur. Julia Irene es docente de música en las escuelas de la zona y ha participado en festivales y peñas a lo largo de la provincia del Neuquén. Esta pareja comenzó realizando una primera y única receta de licor de rosa mosqueta. Posteriormente, estudiaron otros sabores mientras seguían cada uno con sus respectivas ocupaciones laborales. Pruebas de graduación alcohólica y algún que otro curso de gastronomía en la zona los llevaron a profesionalizar su licorería. Víctor es quien más dedicación le pone a este arte y en su propia casa nacen las creaciones. En verano, consiguen la fruta fina y la maceran mientras ofrecen el producto del año anterior. En invierno preparan los licores ya conocidos, concretan nuevos sabores y los estacionan. La degustación previa es la base de su éxito. A la par, siguen dedicados a hacer música con voz, guitarra y otros instrumentos. Jorge Virasoro es otro artesano de este circuito, a quien conocimos en su
casa-taller.
Tradición campera
En nuestro recorrido, llegamos al paraje Cuyín Manzano, donde las grandes formaciones rocosas que ofrece el paisaje no dejaron de asombrarnos. Allí varias familias viven de sus animales y trabajos de campo a la vera del río que serpentea entre las casas dispersas. Fue fácil ubicar a Dagoberto Riquelme. Su arte consiste en realizar trabajos con asta de ciervo y pudimos ver una pequeña exposición en su casa. Nacido en este paraje, desde chico Dagoberto aprendió a tallar y encavar cuchillos como lo hacían sus mayores, con el material que encontraban tirado en el campo. Poco a poco fue agregando metales y madera y así nacieron sus cucharitas, cuchillos, picaportes y muchos otros elementos de utilidad en la vida diaria. También es herrero de sus propias artesanías y complementa alguna de sus piezas con el yunque. Ya en su taller, vimos unas pocas máquinas con que se ayuda en el proceso de trabajo. El resto lo hace a mano. A través de sus dichos conocimos algo más de su trayectoria artesanal. Un excelente tallado combinado con buen gusto y delicadeza son la esencia de esta artesanía. Paciencia y tiempo complementan este fino producto.
Tejidos, licores y dulces parten de las manos laboriosas
En el mismo paraje conocimos a Teresa Chamorro. Nacida allí, es muy activa y ha dado clases de telar mapuche para complementar sus tareas de campo. De un viejo arcón, salieron varios sacos y pulóveres de lana de oveja hilada a mano realizados por ella con una técnica aprendida de niña . Algunas prendas eran de lana natural gris o beige, complementadas con botones de asta. En otras, los teñidos se habían realizado con extractos de plantas. Nos comentó algo simpático: los mapuches utilizan el color rojo para atraer la buena suerte y la energía. Su madre le transmitió conocimientos de hilado y tejido en telar, casi como un juego. De grande le dio valor a lo aprendido espontáneamente. Observamos almohadones, fajas y pies de cama realizados con esa técnica tan de moda. Teresa participó en la Fiesta del Pulóver en Bariloche y la Feria de la Producción y la Artesanía en Neuquén, y obtuvo varios premios con sus tejidos. Pero no todo es tejer en la vida de Teresa. En verano se dedica a cosechar su fruta fina (guinda, grosella, parrilla) y a empezar el proceso de maceración de los dulces y licores a la usanza del campo, utilizando todo lo que la naturaleza pone a su disposición. Todos ellos tienen la satisfacción de vivir de lo que les gusta en el lugar donde se sienten cómodos.
Contactos: En Villa Traful Licores Julia Irene Tel.: 54 2944 479119 / 2944 15 33 1054 E-mail: juliairenehop@hotmail.com
Erica Painepe El Barrio
En Cuyín Manzano: Dagoberto Riquelme Tel.: 54 2944 15622233
Teresa Chamorro Tel.: 54 2944 15 669113 E-mail: info@cuyinmanzano.com
Mónica Pons 
