Puerto Deseado se levanta donde estuvo el fuerte español más antiguo de la Patagonia. Por las calles de la ciudad encontramos los rastros de esa historia que se mantiene viva hasta nuestros días.
Los secretos de la historia
A principios de 2008
Puerto Deseado llamó la atención del país cuando fue publicado que, tras años de trabajo, un equipo de la Universidad de Buenos Aires había descubierto los restos arqueológicos del fuerte español más antiguo de la Patagonia argentina. Fundado sobre la margen derecha del río Deseado en 1790 por la Real Compañía Marítima de Carlos IV con el objetivo de cazar y extraer aceite de lobos marinos y ballenas, este fuerte fue abandonado en 1807 porque la actividad había dejado de ser rentable. El mismo lugar fue elegido en 1884 por el capitán Antonio Oneto, enviado por el gobierno nacional, para instalar el grupo de colones que comandaba con el fin de afianzar la colonia recientemente creada. Esta fecha se considera la de la fundación de Puerto Deseado.
No había restos visibles de la construcción hasta 2005. Sólo una porción fue desenterrada, pero en ella se encontraron objetos de uso cotidiano como zapatos, botones, tinajas de aceite, platos de cerámica y porrones.
La ciudad avanza sobre rieles
Un rol fundamental en la historia más reciente de la ciudad lo cumplió, como en muchas otras localidades de la Patagonia y de toda la Argentina, el tren. Dos lugares en Puerto Deseado recuerdan la importancia de este medio. El primero es el denominado Vagón Histórico, que se encuentra en la esquina de San Martín y Almirante Brown. Se trata de un vagón construido en 1898 que se utilizó entre 1909 y 1978 en el recorrido de la línea Puerto Deseado-Las Heras. Fue testigo, entre muchas otras cosas, de las operaciones militares desatadas como reacción a las huelgas rurales de 1920 y 1921. Con el tiempo, como ocurrió con muchas otras líneas en el país, esta vía cayó en desuso y fue cerrada, pero en 1980 el vagón se remató y fue recuperado por una movilización popular. Fue declarado Monumento Histórico Provincial y en la actualidad en él funciona la Oficina de Informes Turísticos.
Relacionada con el vagón, la Estación del Ferrocarril fue declarada Monumento Histórico Municipal y en ella funciona actualmente el
Museo del Tren. Esta construcción data de 1909 y fue levantada con piedras de la zona.
El alma de la ciudad
Entre las calles 12 de Octubre y Don Bosco se encuentran la iglesia Nuestra Señora de la Guardia y el colegio salesiano San José, otra parte de la historia de la ciudad que marca la importancia que tuvo esta orden en el desarrollo de la comunidad. El colegio salesiano se fundó en 1926 y casi veinte años más tarde, entre 1950 y 1960, se levantó la iglesia. En el colegio puede visitarse el Museo Regional Padre Beauvoir, especializado en ciencias naturales y arqueología.
Otro lugar de interés para visitar es el Muelle de Ramón, originalmente construido en 1911 totalmente con madera y provisto en su momento de vías que permitían el trasbordo de la mercadería directamente a los vagones del tren. Fue remodelado y en la actualidad sobre sus bases originales de madera se levanta una plataforma de hormigón. En él funciona hoy el Club de Pesca y Náutica. También recomendamos visitar el
Museo Municipal Mario Brozoski, en el que pueden apreciarse los restos de la corbeta inglesa Swift.
Marcos Rodríguez 
