Osorno se distingue por una edificación con influencia europea y parques, plazas y costaneras con exuberante vegetación en los sectores aledaños a los ríos que la cruzan. Comenzamos nuestro paseo desde la Plaza de Armas, que concentra los principales edificios públicos y la iglesia catedral de San Mateo, de estilo arquitectónico ojival. Desde 1577, fue reconstruida en cinco oportunidades y por su excelente acústica recibe galas de música y los conciertos de las Semanas Musicales de Frutillar. En esa manzana se luce una pileta de grandes dimensiones con iluminación multicolor y un canelo que fue plantado en 1938 por la poetisa chilena Gabriela Mistral. A pocos pasos de la Plaza de Armas, sobre la calle Matta, el Centro Cultural Osorno merece una visita, ya que en sus interesantes muestras teatrales y de arte evidencian el desarrollo artístico de la ciudad.
Mónica Pons